Para los más pequeños, Porsche Angelópolis preparó una pista de carreras infantil, permitiendo a los niños vivir su propia aventura automovilística. Los simuladores de carreras estuvieron disponibles durante todo el día, ofreciendo a los asistentes la oportunidad de ponerse al volante y experimentar la adrenalina de conducir un Porsche en un entorno virtual realista.
A medida que avanzaba el día, los adultos disfrutaron de snacks como tablas de carnes frías y cervezas, manteniendo la energía y el entusiasmo mientras seguían de cerca la emocionante carrera de Le Mans. Uno de los momentos más destacados del evento fue la oportunidad de participar en hot laps y pruebas de manejo, guiados por un piloto profesional. Los asistentes pudieron sentir la potencia y el rendimiento de los vehículos Porsche en su máxima expresión, haciendo de esta experiencia algo inolvidable.
La celebración también incluyó un homenaje especial por el Día del Padre, reconociendo y celebrando a todos los padres presentes. Fue un día llena de emociones, velocidad y festejos. En este evento no solo reunió a los aficionados del automovilismo, sino que también fortaleció los lazos familiares y comunitarios, demostrando una vez más la pasión y dedicación de la marca Porsche hacia sus clientes y seguidores.