Esta edición tuvo lugar en la nueva nave de Porsche Centre Santa Fe, ubicada en el área del taller, un espacio recientemente renovado que ofreció una ambientación única y disruptiva, perfectamente alineada con el espíritu innovador de la marca.
El evento fue diseñado como una experiencia inmersiva para disfrutar de la carrera en tiempo real, combinando la emoción de la competencia con momentos de convivencia y actividades exclusivas. Juegos como Jenga gigante, ping pong, dardos, corn hole y minigolf aportaron un ambiente relajado y dinámico, mientras que las rifas con artículos especiales de la marca incentivaron la participación activa de los invitados.
La atmósfera del evento destacó por su originalidad y atención al detalle. El montaje en la nueva nave brindó una sensación industrial y moderna, ideal para acentuar la personalidad de Porsche. Se acondicionó un área lounge con coffee break, comida de conocidos restaurantes como: Bobo Burgers, Sandos, Ice cream nation y Heineken estuvieron presentes, zonas de descanso y ambientación premium que invitaban a quedarse y disfrutar, al tiempo que se generan conversaciones en torno a los vehículos, la historia de la marca y el entusiasmo compartido por el automovilismo.
Además, se dispuso una exhibición de modelos Porsche Approved y nuevos, integrando la experiencia de marca con oportunidades reales de conexión comercial. La “Le Mans Watching Party" fue, sin duda, un ejemplo del compromiso de Porsche por ofrecer momentos memorables, que van más allá de lo esperado y fortalecen el vínculo con su comunidad.